LA VIDA

El poeta se hace al andar. Hoy estos pasos son los de la rabia. Ayer fueron pasos de lágrimas en un hombro que ya viste de luto. Mañana serán versos que recorrerán sus entrañas cuando se mire al espejo. Lo demás será ceniza guardada en el pecho, sin esperas, sin resurgimiento. La decisión del Dios que lleva dentro. La penitencia de lo que supone cargar(se) un corazón.